diciembre 07, 2008

La prueba

No sé si en esta época todo el mundo se haga la prueba.

Aunque creo que es una inquietud general desde que comenzamos a tener relaciones sexuales, yo hacía algunos meses que sabía que tenía que hacerme el examen del VIH por una cuestión de conciencia, de edad, de sanidad, de congruencia, de todo.

Hace unos meses un urólogo que fui a ver en Francia por una infección que al final sólo existía en mi mente, acabó por darme el ultimátum. "Dépistage" le llaman allá. De todos modos debo decir que pasé mucho miedo. Un miedo surrealista que fue aumentando con los meses que dejé pasar sin ir al laboratorio.

Por un lado me auto tranquilizaba pensando que he sido cauteloso, que siempre creí saber con quién estaba. Por el otro, sabía que eso no borraba el riesgo. Y que no: uno
no sabe siempre con quién está.

Aferrado al argumento de que es mejor saber que no saber (que no sé si sea cierto, ese día simplemente lo adopté), finalmente una mañana de esta semana fui a que me tomaran sangre antes de irme al gimnasio. Después trascurrieron seis horas largas, difusas, acuosas, deformes en que trataba de prepararme mentalmente para las dos posibles respuestas... pero no lo conseguía.

Sin saber cómo, finalmente me vi con un sobre blanco en la mano, adentro del coche. Y sin parpadear, mis pobres ojos también atemorizados volaron sobre el mensaje y, gracias a Dios, dieron con la palabra: negativo. Dos veces. Negativo, negativo.


Naturalmente, el alivio es enorme, indescriptible. Lloras. De alegría, de reconocer abiertamente el miedo que sentiste. La prueba, a final de cuentas, es formadora. Además de la información vital que proporciona, nos hace concientes de un mundo de cosas que se pueden perder a cambio de muy poco. De pronto, saberse sanos vuelve a ser la cosa más importante.
La más importante.

No quiero olvidarlo.


¿Tú has pensado en hacértela?

2 comentarios:

Herramientas Psi dijo...

Yo no me la hice poero porque hace más de 6 meses que no tengo relaciones con nadie... Triste pero real, así que por ahora el tema enfermedades veneéreas no me afecta.

Anónimo dijo...

YO HACE AÑOS Y NO SOLO MESES, SENTIA LA NECESIDAD DE HACERME LA PRUEBA, PERO POR MULTIPLES Y ESTUPIDAS RAZONES NO LA HICE.

GRACIAS A MI BEBE YO TUVE LA PRUEBA, Y DIJE "TUVE" Y NO "ME HICE" POR QUE EN EL HOSPITAL, ME HICIERON PRUEBA DE TODO INCLUYENDO VIH Y COMO HUBO 3 O 4 PRUEBAS DE LABORATORIO EN EL TRANSCURSO DE EL EMBARAZO, CUANDO ESTA LLEGO YO CREI QUE ERA OTRA PRUEBA MAS, PERO AL PREGUNTARLE A MI PARTERA LOS RESULTADOS DE LOS ANALISIS, ME RESPONDIO MUY SONRIENTE, ERES UNA MUJER MUY SANA, NO TIENES EPATITIS, NO TIENES NINGUNA INFECCION, NO TIENES SIDA, NO TIENES NADA, AL CONTRARIO TIENES UNA SANGRE MUY BUENA.

EL PLAN DE QUE MI BEBE NACIERA EN EL AGUA ME HIZO HACERME LA PRUEBA, SIN SABERLO Y SIN SUFRIR EL MIEDO DE EL RESULTADO, QUE ESE ERA MI MAS GRANDE PRETEXTO PARA NO HACERLA.

carmen

Gracias por leerme, pero ya que andas en eso, escríbeme tu comentario...

Archivo del blog

Contacto

reneasdrubal@hotmail.com